El
magnetismo es invisible, pero a la vez omnipresente. Podemos encontrar el
magnetismo en numerosos objetos que utilizamos, desde la vibración de unos
altavoces, hasta un cepillo de dientes eléctrico.
La
brújula es un instrumento de orientación que utiliza una aguja imantada para
señalar el norte magnético terrestre. Su funcionamiento se basa en el
magnetismo terrestre. La brújula tal y
como la conocemos ahora, fue inventada en el años 1250 y hasta numerosos
años, se pensaba que esa aguja señalaba el norte, debido a una montaña magnética
en el norte del planeta. Esa montaña, llevó a la muerte a una gran cantidad de
tripulaciones.
William
Gilbert estudió la inclinación de una aguja magnética concluyendo que la Tierra
se comporta como un gran imán. Dicho estudio fue realizado con una aguja magnética
y una piedra magnetita. En 1660 fue escrito y publicado su libro más conocido,
llamado “De Magnete” en el cual se recogía su pensamiento sobre que la Tierra
era un imán.
Carl
Friedrich Gauss fue un matemático, astrónomo, geodesta, y físico alemán, que
hizo grandes descubrimientos en su vida. El magnetómetro fue uno de sus
inventos más importantes para el mundo del magnetismo. Este aparato sirve para
medir y calcular, la fuerza y dirección del campo magnético al que está
sometido. Afirmó que los pájaros utilizan el campo magnético para poder
guiarse.
No hay comentarios:
Publicar un comentario